Si ya compraste tu primer inmueble, seguramente estás deseando tramitar una segunda hipoteca y con ello, aumentar tu patrimonio familiar y seguir gozando de la tranquilidad de tener una inversión que no se devalúa con los años, sino que aumenta.
Hacer esto, es bastante recomendable, ya que el trámite puede ser más fácil, si pagaste a tiempo el primer crédito y estás en las condiciones ideales para adquirir un nuevo compromiso de esta índole.
Por lo general, las instituciones bancarias, otorgan una segunda hipoteca a quienes:
- Poseen una estabilidad económica sólida
- La economía del cliente, demuestra un crecimiento puntual.
- Tienen un excelente score crediticio
- Liquidaste sin dificultades tu primer crédito hipotecario.
En estos casos por más atractivo que pueda parecer hacerte de una nueva propiedad, no recomendamos buscar esta facilidad cuando:
- Hay o hubo dificultades para pagar las mensualidades de la primer hipoteca a tiempo.
- El monto de la nueva hipoteca supera el 30% de sus ingresos totales.
- Existen muchos compromisos económicos actuales, de hecho el banco se asegurará que tu solvencia no se vea rebasada.
- Saldos pendientes en tu Buró de Crédito y reportes negativos como quitas.
- No existe estrategia clara de inversión.
Si estas casi por liquidar tu primer crédito, el banco te puede prestar para un segundo predio, de esa forma liquidarás el primero y te servirá de garantía para tu nueva hipoteca, no obstante, todo debe estar en regla.
El préstamo de la segunda hipoteca podrá ser hasta del 95% de financiamiento, todo dependerá de tu situación financiera, tus compromisos al momento, y si existen otras hipotecas activas.
De hacer el trámite con el mismo banco, tu broker hipotecario podrá negociar mejores tasas de interés y un crédito más accesible con oportunidades financieras más atractivas.
Hay créditos donde se puede hipotecar el inmueble principal para la compra de un segundo para inversión y son muy baratos, con una tasa de interés aún más baja que el propio crédito de liquidez pues se justifica el uso de los recursos para la adquisición de un segundo inmueble.
Otras opciones
Por otra parte, si lo que deseas no es adquirir una segunda casa, sino hacer frente a otros gastos como la apertura o ampliación de un negocio, un viaje o una enfermedad, puedes solicitar un crédito de liquidez con garantía inmobiliaria.
Te prestarán hasta el 75% del valor de tu propiedad y gozas de diferentes beneficios como tasas fijas y no penalización por pago por adelantado.
¡Asesórate con un broker hipotecario, entre ambos, busquen el producto financiero que más se adecúe a tus necesidades y la estrategia para obtenerlo!